Una idea extendida sobre el
fenómeno de la lectura es que se erige en una fuente constante de cultura.
Pero, ¿sabíais que la lectura también tiene beneficios físicos, emocionales y
sociales?
Vamos a repasar unos pocos:
En el apartado de los beneficios
físicos destaca el aumento de la reserva cognitiva, que no es otra cosa que la capacidad
de tolerar cambios en las estructuras cerebrales. A mayor reserva cognitiva,
mayor protección contra las enfermedades neurodegenerativas (como el
Alzheimer), y mejor y más duradera memoria.