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Saber escribir bien tiene sus secretos... y aquí te enseño algunos

Saber escribir bien tiene sus secretos
Saber escribir bien tiene sus secretos
Dentro de las competencias informacionales está el grupo de habilidades de comunicación, de transmisión de la información. En esta entrada cuento algunos secretos para redactar correctamente un texto.

Escribir una carta oficial, preparar un trabajo para el colegio o la universidad o redactar un informe para los jefes... ¿os suenan estas acciones? La expresión escrita está en multitud de nuestras rutinas (de niños y mayores) y si queremos que nuestros escritos tengan el impacto que deseamos tenemos que aplicar algunos trucos. Empecemos por los más básicos:

Lectura con prisas en niños

Lectura con prisas en niños
Lectura con prisas en niños
En las últimas semanas varios padres (1) me han hablado sobre un problema concreto de algunos niños en cuanto a la lectura: leen con prisas, es decir, les interesa tanto saber el final que pasan por las páginas sin prestar demasiada atención y, prácticamente, sin enterarse de lo que pasa en ellas.

Este problema, muy común también entre adultos, forma parte de lo que yo llamo malos hábitos lectores, que no son otra cosa que el conjunto de malas prácticas y vicios que impiden disfrutar y aprovechar al máximo la experiencia lectora. En las entradas dedicadas a trucos, consejos y prácticas para mejorar la comprensión lectora en niños hablaré con más detalle de este tipo de problemas.

Detectar y resolver problemas de velocidad lectora en niños. Primera parte

Detectar y resolver problemas de velocidad lectora en niños
Detectar problemas de velocidad lectora en niños
En las entradas anteriores dedicadas a la velocidad lectora en niños he insistido mucho en  que lo realmente importante en cuanto a la lectura de los niños es que conozcan bien su mecánica y que comprendan lo que leen.

Seguiré remarcando la idea de primar la comprensión lectora frente a velocidad. Sin embargo, es cierto que algunos niños arrastran malos hábitos lectores que provocan que lean más lentamente y, por ende, que su capacidad de comprensión lectora disminuya.


Fijaos que hablo de malos hábitos lectores, no de problemas de aprendizaje ni nada por el estilo (1). No es difícil detectar estos malos hábitos, aunque corregirlos exige de conocimientos específicos sobre el tema y mucha mucha mucha paciencia.

Primeros consejos para detectar y eliminar malos hábitos lectores en niños, y mejorar su velocidad y comprensión lectora:

1. Se lee con la mente, a través de los ojos. Cuando un niño lee en silencio gesticulando como si leyera en voz alta (como verbalizando la lectura) está perdiendo un tiempo precioso y además se está dejando por el camino la comprensión lectora. Los ojos y la mente son mucho más rápidos que el habla.